Para la diseñadora Marisa Martín la respuesta está en que es más fácil trabajar para un maniquí con una forma recta, esto sumado a la idea generalizada de que las modelos delgadas venden más. No obstante, una tesis desarrollada por David Roca para la Universidad Autónoma de Barcelona titulada La eficacia de las modelos delgadas vs las modelos normales en anuncios de lencería, asegura que la mayoría de las mujeres tienen una percepción más positiva de los productos cuando las modelos tienen un aspecto saludable.

         La estetización de los estereotipos del mundo de la lencería puede generar consecuencias tan negativas como la sexualización femenina y la reducción de la mujer a aspectos superficiales, otorgándole a las modelos la calificación de ángeles, en el caso de Victoria’s Secret. La tesis Análisis discursivo del modelo de estética corporal femenina de la publicidad y desfile anual de Victoria’s Secret escrito por la autora Sara Raquel Jácome refuerza que por culpa de los desfiles de lencería “el cuerpo de la mujer se ha convertido en un cuerpo clausurado, apático, fungiendo el papel de un simple objeto que existe”.