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na historia por contar: Zainab Fasiki
Mientras los medios árabes conservadores borran su historia ignorando a una ilustradora a la que tachan de loca, los internacionales aclaman su fortaleza y valentía, y es que Zainab Fasiki se ha ganado a pulso la categoría de referente. Una mujer incapaz de quedarse callada ante las injusticias que castigan a su país, Marruecos, y que decidió revelarse a golpe de papel y tinta para denunciar las situaciones que encierran a la mujer musulmana. Fasiki es una feminista en un mundo de hombres que comenzó dibujándose a sí misma desnuda para concienciar a las mentes dispuestas a no aceptar una realidad machista y para normalizar la sexualidad y las diferencias del cuerpo femenino, un ejemplo claro de cómo la ropa o la ausencia de ella puede convertirse un símbolo reivindicativo.
Fuente: elaboración propia
Su trabajo como activista e ilustradora
Además, la artista también es una gran activista que cuenta con un colectivo, WomenPowerMorocco, que se centra en ayudar a mujeres marroquíes que quieren ser artistas. De esta forma, la ilustradora, que ha conseguido darse a conocer tras las fronteras árabes, es un modelo inspirador para niñas que ven coartados sus sueños de dedicarse al mundo cultural fuera de la religión conservadora.
La ilustradora, con tan solo 25 años, ha publicado un libro llamado hshouma, literalmente se traduce como vergüenza, una palabra que como tantas otras son un tabú para el mundo árabe. Zainab Fasiki asegura: “no hago mi trabajo por diversión, lo hago para dar un mensaje de invitar a todas las comunidades marroquís a vivir en diversidad y para poder parar la violencia de género”. El proyecto recoge alguna de sus ilustraciones más virales como la de la chica agredida en el transporte público, una denuncia directa a las injusticias que sufren muchas mujeres árabes. Según la autora, su inspiración proviene principalmente de sus emociones. “En Marruecos no puedo ir con un vestido corto o en bikini a la playa porque hay muchas posibilidades de ser agredida sexualmente, esto es una realidad que se niega y de la que no se habla. Cuando vengo a España aprovecho para tener libertad a la hora de vestir”, confesó Fasiki en el seminario Feminismos en el mundo árabe: corrientes, perspectivas y retos del futuro celebrado por la Universidad de Alicante.
Violencia de género en Marruecos
No hago esto por diversión, lo hago para invitar a la comunidad marroquí a vivir en diversidad
- Zainab Fasiki
Y es que el miedo se apodera de las mujeres en un país que busca excusas en el contexto político-religioso para restar importancia a datos que resultan alarmantes. Según una Macroencuesta publicada en el portal de Violencia de Género de Marruecos, el 62,8% de las mujeres marroquíes ha sido alguna vez víctima de violencia de género, un porcentaje muy por encima del dato mundial que se sitúa en un 35% de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas. El dato se agrava además al comprobar que según el Ministerio de Solidaridad, Familia y Desarrollo Social marroquí, tan solo el 6,6% de los casos han sido denunciados.
Posibles soluciones legales
Para disminuir estas cifras que han alcanzado niveles demasiado altos, se ha creado una nueva ley en contra de la violencia de género. La ley 103-13 de Marruecos establece ayudas legislativas a las víctimas de acoso y penas para los agresores que van de los 900 euros de multa a 6 meses de prisión. Aunque la aprobación de la ley ha supuesto un cambio histórico para la situación de las mujeres, el cambio social y dentro de los hogares, según Zainab Fasiki, es todavía demasiado lento y son necesarias las movilizaciones feministas para cambiar los pensamientos conservadores que siguen posicionando a la mujer marroquí detrás de la sombra de los hombres.
Fuente: elaboración propia